Una investigación regional, elaborada por especialistas del Banco Interamericano de Desarrolo (BID) recomienda a las economías de la región centroamericana y de República Dominicana abrirse paso para el diseño de una política industrial integral, de forma que puedan aumentar su competitividad y sentar bases para el emprendimiento y la innovación.
La investigación del BID titulada ¿Tiempo para ajustar el rumbo?, opciones de políticas ante el cambio en el entorno externo en Centroamérica y República Dominicana, coordinada por los especialistas Priscila Gutiérrez Juárez y Osmel Manzano, llama a traer inversiones de calidad.
Advierten que la región centroamericana y de RD durante muchos años han dependido del modelo de desarrollo productivo basado en la atracción de Inversión Extranjera Directa (IED) a través de incentivos fiscales, especialmente en zonas francas. No obstante, proyectan una desaceleración de la IED en ese sector debido a la eliminación de las exenciones en 2015 como parte del Acuerdo de Subvenciones y Medidas Compensatorias, de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
“Si bien Centroamérica y República Dominicana han sabido atraer capitales de manera sobresaliente, escasa atención se ha prestado a la calidad de este tipo de inversiones, las cuales han tenido poco impacto en las economías centroamericanas”. Señalan que para la región los incentivos fiscales han significado un alto costo para la recaudación fiscal.
En ese aspecto consideran fundamental aplicar un modelo que pueda potenciar las sinergias locales a través de la mejora de las agencias para la promoción de la inversión, evaluar los resultados de las políticas para incentivos fiscales; promocionar el crecimiento de empresas multilatinas y generar un adecuado ambiente político para la elaboración de reformas eficaces de este nuevo modelo económico.
En el ámbito fiscal, aducen que aun cuando las reformas tirbutarias no han generado los ingresos suficientes para solventar el gasto que se ha financiado con deuda externa de bajo costo, un primer reto para la región es el financiamiento de los déficits fiscales, además de la aplicación de medidas que eleven la calidad y eficiencia del gasto público.
Sugieren a los países asumir una consolidación fiscal y, muy especialmente tomar en cuenta la compensación de las zonas francas derivada de la eliminación de los incentivos tributarios .
El estudio alerta a diseñar una coordinación fiscal eficiente que les permita a las empresas del sector ser más competitivas y productivas durante esta transición.
Los expertos del BID sugieren a las economías de la región ir hacia una fase de transición y adaptación al nuevo orden mundial.
Destaca la limitante que plantea el acceso de Centroamérica al crédito para la transformación productiva, los rezagos en infraestructura, inestabilidad macroeconómica y la falta de políticas y de esquemas adecuados que generen incentivos necesarios para innovar. En el caso específico de República Dominicana recomiendan reforzar programas de innovación, ampliar el acceso al financiamiento, y crear “clusters industriales” para diversificar la producción del país.
((Mercado
Aplicar políticas para el desarrollo
Para los especialistas del BID, la política industrial empleada en Centroamérica y en República Dominicana ha estado concentrada en una fuerte promoción de las exportaciones y atracción de la inversión extranjera, “sin embargo se ha constatado que no han contribuido a aumentar la productividad de la región lo suficiente como para que esta alcance un nivel que le permita realmente competir en el mercado internacional”.
Citan entre otros aspectos, que a pesar del desarrollo de las maquinas, de la escala tecnológica de la industria agropecuaria y productos de poco valor agregado, la industria de mayor rango de especialización sigue siendo limitada. “Esto le impide a la región tener una ventaja comparativa con otras regiones del mundo que sí han apostado por una industria de alta especialización, como muchos países asiáticos”, afirman.
Aducen que los países de la región deben enfocar su atención en repensar el diseño de una política industrial sustentada en intervenciones horizontales, ya que se abarca a todos los sectores económicos y el marco institucional y político para implementarlas es menos complicado debido a su generalidad.
Recomiendan buscar políticas de desarrollo productivo que ataquen “cuellos de botella”.
Comentarios recientes