En República Dominicana se han aplicado tres leyes de amnistía tributaria durante los últimos 13 años (en 2001 con la Ley 11-01, en 2007 vía la Ley 183-07 y recientemente la Ley 309-12), y solo esta última que fue aplicada en 2013 proyecta la captación de ingresos por el orden de RD$5,586.0 millones hasta 2014.

La amnistía fiscal “se entiende como una medida o conjunto de medidas con el fin de condonar penas o sanciones de carácter civil y criminal a los contribuyentes que admitan voluntariamente no haber pagado la deuda impositiva correspondiente a impuestos de períodos precedentes, o haberlo hecho parcialmente, y que ahora declaran por entero”, explica la Dirección General de Impuestos Internos (DGII), en un estudio elaborado por el Departamento de Estudios Económicos y Tributarios de la entidad.

El 50% del recaudo por concepto de la amnistía establecida por la Ley 309-12, desde su entrada en vigor hasta 2014, fue captado en los primeros cinco meses de aplicación, mostrando así la acogida que tuvo esta medida por parte de los contribuyentes, dice el estudio “Leyes de Amnistías Tributarias en República Dominicana,  descripción y resultados”, de diciembre 2014.

En el documento se explica que las amnistías tributarias buscan alcanzar un efecto recaudatorio inmediato para disminuir el déficit público que tenga el país en el momento en que se aplique, y obtener patrimonios y rentas extraordinarias o no esperadas. Además, agrega, puede contribuir a la mejora del cumplimiento de las obligaciones tributarias, crecimiento de la recaudación y una distribución de la carga fiscal.

Las recaudaciones obtenidas mediante la aplicación de la amnistía de 2001, con la Ley 11-01, representó el 0.4% del Producto Interno Bruto (PIB) de ese año y el 5.1% del recaudo de la DGII, mientras que la medida aplicada en el período 2007-2008 con la Ley 183/07, representó el 0.3% del PIB y el 2.4% de las captaciones de Impuestos Internos en ese momento.

Aporte
Durante 2013 se aplicó la amnistía fiscal correspondiente a la Ley 309-12, que permitió recaudar los RD$5,586 millones señalados anteriormente, representando un 0.2% del PIB y un 2.0% de las recaudaciones de la DGII.

La Ley 309-12 de amnistía tributaria fue aplicada de manera conjunta con la Ley 253-12 de Reforma Fiscal, con el objetivo de aumentar la capacidad recaudadora del Estado, regularizar los patrimonios no justificados y crear condiciones para que los contribuyentes transparenten sus ingresos y operaciones.

Mediante esta disposición se captaron RD$1,225.1 millones por deudas con la administración tributaria desde 2012 hasta 2014, RD$2,649.8 millones por concepto de omisiones y declarantes; RD$1,310.7 millones mediante transferencias inmobiliarias y RD$400.3 millones por concepto de corrección patrimonial.

Las amnistías fiscales abarcan a las personas jurídicas, negocios de único dueño y personas físicas.

Tomando en cuenta la cantidad de personas acogidos a la amnistía fue de 39,352 contribuyentes, de los cuales el 66% fueron personas físicas y el restante 34% personas jurídicas (empresas).

A pesar de que la mayor parte de los contribuyentes acogidos a la Amnistía correspondieron a Personas Físicas, el 74% del monto recaudado correspondió a personas jurídicas, contra un 26% de personas físicas.

Al analizar la recaudación de amnistía por el sector económico, en el estudio se indica que los contribuyentes del sector servicio fueron los que aportaron más con un monto de RD$4,575.2 millones, representando el 81.9% del total del monto recaudado. En tanto que el aporte de los sectores industria y agropecuaria representaron el 17.5% y 0.6%, respectivamente. 

Ayuda a mejorar el cumplimiento
En principio, dice el documento de Impuestos Internos (DGII), publicado recientemente, que las amnistías tributarias buscan cumplir con varios objetivos fundamentales, entre los que figuran el incremento de los ingresos tributarios,

ampliar el conocimiento y control de las bases tributarias, y captar y recuperar capitales ilegalmente ocultos.

 Asimismo, busca mejorar el cumplimiento futuro de las obligaciones tributarias, mejorar la distribución de la carga fiscal de algunos grupos sociales, y reducir el déficit sin aumentar los impuestos ni reducir el presupuesto público.

La disposición aplicada en 2013 abarcó a distintos impuestos, por lo cual  fue más abarcadora     que las dos anteriores.

En 2013 abarcó los tributos:
-Impuesto sobre la Renta (ISR).

-Impuesto a la Transferencia de Bienes Industrializados y Servicios (ITBIS).

– Impuesto sobre Sucesiones.

– Impuesto a la Propiedad Inmobiliaria (IPI).

– Impuesto sobre Transferencia Inmobiliaria.

– Impuesto sobre los activos aplicados a la propiedad inmobiliaria.

– Intereses, recargos y multas relativos a la importación de mercancías.

– Incrementos Patrimoniales no justificados.

– Deudas pendientes ante la Administración o en otras instancias tributarias.